Walter es un perro labrador al que le encanta darse unos buenos chapuzones en el mar. ¡Y a quien no!
Un buen día, después de ver como el perro corría como un loco por la montaña abajo para darse su baño diario, sus dueños quisieron conocer cómo sería lo que veía el animal desde que lo soltaban hasta que llegaba al agua.
Así que hicieron la prueba. Colocaron a Walter un arnés con una cámara GoPro grabando, desde que lo soltaban hasta que se zambullía en el agua.
El resultado es pura adrenalina, con un final de lo más emocionante y refrescante.
Nada más soltarlo en el patio de casa, el perro empieza a correr colina abajo en dirección a la playa, saltando sobre jardines, escaleras, muros, acelerando como un loco por los caminos, hasta llegar a una pequeña cala llena de gente. Sin hacerles ningún caso, esquiva a los bañistas y se zambulle de un salto en las aguas cristalinas de Siracusa (Italia).
El mejor momento del video es sin duda cuando, después de la carrera frenética, Walter pega un salto y vuela por los aires hasta caer de lleno en el agua. ¡Qué envidia de momento! Se le ve feliz y en pleno éxtasis.
Llama la atención la estabilidad de la imagen y lo bien que graba la cámara. Pese a los vaivenes y saltos que pega el perro, no llega a marear ni a desprenderse.
Nos espera una avalancha de dueños grabando a sus mascotas, con arneses de GoPro, movidos por la curiosidad de saber por donde se mueven los animales cuando les quitan las correas, y dejan que realicen sus andanzas y correrías con total libertad.